Nueva Biblia Latinoamericana
Cuando se estaba acercando a Egipto, Abram dijo a Sarai su mujer: "Mira, sé que eres una mujer de hermoso parecer; (Génesis 12:11)
y sucederá que cuando te vean los Egipcios, dirán: 'Esta es su mujer'; y me matarán, pero a ti te dejarán vivir. (Génesis 12:12)
Di, por favor, que eres mi hermana, para que me vaya bien por causa tuya, y para que yo viva gracias a ti." (Génesis 12:13)
Cuando Abram entró en Egipto, los Egipcios vieron que la mujer era muy hermosa.
La vieron los oficiales de Faraón y la alabaron delante de él. Entonces la mujer fue llevada a la casa de Faraón. (Génesis 12:15)
Y éste trató bien a Abram por causa de ella. Le dio ovejas, vacas, asnos, siervos, siervas, asnas y camellos. (Génesis 12:16)
Pero el SEÑOR hirió a Faraón y a su casa con grandes plagas por causa de Sarai, mujer de Abram. (Génesis 12:17)

Otras publicaciones relacionadas con "Génesis 12:14":

Jonatán Toledo
El clamor de Agar
En este sermón se celebra el papel de las mujeres y se habla de la historia de Agar en la Biblia como una mujer fuerte y luchadora. Se destaca la importancia de confrontar los problemas y buscar la guía de Dios, manteniendo siempre la humildad.


Dr. Roberto Miranda
Una oportunidad desperdiciada
Este sermón habla sobre cómo reaccionamos ante las ofensas y conflictos en nuestras vidas, y la importancia de vivir conforme a los principios del Reino de Dios. Se utiliza la historia de Dina en Génesis para ilustrar cómo los hijos de Dios deben poner por encima los valores del Reino de Dios, como la paz, la misericordia y el perdón.


Génesis 12:14 - Referencia Cruzada

los hijos de Dios vieron que las hijas de los hombres eran hermosas, y tomaron para sí mujeres de entre todas las que les gustaban. (Génesis 6:2)
Sucedió después de estas cosas que la mujer de su amo miró a José con deseo y le dijo: "Acuéstate conmigo." (Génesis 39:7)
Cuando la mujer vio que el árbol era bueno para comer, y que era agradable a los ojos, y que el árbol era deseable para alcanzar sabiduría, tomó de su fruto y comió. También dio a su marido que estaba con ella, y él comió. (Génesis 3:6)
Pero Yo les digo que todo el que mire a una mujer para codiciarla ya cometió adulterio con ella en su corazón. (Mateo 5:28)